Noche mágica para Victoria FC que desató una
tormenta de goles con un Paulo Jacquet encendido y Rodrigo Ozuna imparable,
firmando un póker letal. El mediocampo fue una autopista a favor de los de
Victoria, que aplastaron cada intento rival con presión alta. Ñemby Wolves tuvo
destellos, pero se vio superado en todas las líneas. La ilusión por la Copa de
Oro toma forma para Victoria. Los Wolves buscarán reponerse ante Ore Ru, aún
con espíritu de lucha intacto.